Perdi un lector y gane en la conciencia...

POR SÓCRATES A. CAMPOS LEMUS.

Es curioso, pero hace apenas unos días, al encontrar a uno de los pomposos grillos de la política, de esos que todo el día tragan santos y defecan diablos, de los que se codean con el Arzobispo y van a las reuniones de las Hijas de María y a los “millonarios de Cristo”, si, ya saben ustedes, de los que dicen una cosa y hacen otra, los que se desviven para que la gente crea que son decentes, cuando van a los table dance ocultos en gorras y disfrazados de “obreros”, de los que dejan a su señora esperando porque van a buscar a las suripantas que les traen al llamar por teléfono, en fin, indignado, me dijo que: “ya no leía mis colaboraciones porque en ellas decía muchas groserías y decía cosas terribles en contra de los políticos que son sus amigos y con los que hace grandes negocios”. En fin, en principio me alarmé, es cierto que a veces digo y escribo muchas groserías, pero es la forma más indicada para definir o aclarar una situación o lo que sentimos por un problema o por un político o un banquero, sobre todo, cuando sabemos, por experiencia, de lo que son capaces; pero de todos modos continué preocupado, no es que nos haga mella el que uno más deje de leer lo que escribimos, finalmente, no creo que tengamos tantos seguidores en las redes o en twitter, pero bueno, si decimos y nos quejamos porque los políticos no entienden cuando se les dicen las cosas, cuando menos, tuve que ver con realismo y claridad la razón real del por qué este “angelito” no nos volvería a leer y cuando llegué a sus amigos y les pregunté, todos, riendo me dijeron: “la verdad es que no lee, no sabe leer, le molesta leer, jamás ha leído, ni siquiera la cartelera de los cines, cuando se junto con nosotros lo primero que nos pregunta es qué noticias hemos leído, porque la florera y su falta de capacidad y de lectura, le impiden leer los diarios, por ello, solamente escucha o ve los noticieros, un ratito, porque dice que le cambia a ver las telenovelas, porque las noticias son muy aburridas…”

Pero de todos modos, “perder a un lector” es de preocupación cuando sabemos que la tendencia es a que la gente no lea para que la puedan manipular y engañar mejor los políticos y los banqueros. Así que al llegar triste y melancólico por esa “pérdida”, prendí la computadora y recibí un corro de uno de los amigos que en verdad me levantó el ánimo, lo digo en serio y sin albur…En este correo se habla de lo que dijo la ex secretaria Xóchitl Gálvez cuando se le acusó de grosera en una entrevista , contestando: “QUÉ ES GORSERÍA?”:

“grosería ES QUE EL SALARIO MÍNIMO DE UN TRABAJADOR SEA DE 54 PESOS al día (1620 pesos al mes) y el de un diputado de 200 mil pesos pudiendo llegar con dietas y otros prebendas a 350 mil pesos.”

“GROSERÍA es que un catedrático de la universidad o un cirujano de la sanidad pública ganen menos que el concejal de festejos de un ayuntamiento de tercera”

“GROSERÍA es que los políticos se suban sus retribuciones en el porcentaje que les apetezca, (siempre por unanimidad, por supuesto, y al inicio de la legislatura”

“GROSERÍA es comparar la jubilación de un diputado con la de una viuda”.

“GROSERÍA es que un ciudadano tenga que cotizar 35 años para recibir una jubilación y a los diputados les baste sólo con tres o con seis según el caso y que los miembros del gobierno para cobrar la pensión máxima sólo necesitan jurar cargo”.

“GROSERÍA es que los diputados sean los únicos trabajadores (¿?) de este país que están exentos de tributar un tercio de su sueldo del ISR”

“GROSERÍA es colocar en la administración a miles de asesores (léase amigotes con sueldo) que ya desearían los técnicos más calificados”.

“GROSERÍA es el ingente dinero destinado a sostener a los partidos aprobados por los mismos políticos que viven de ellos”.

“GROSERÍA es que a un político no se le exija superar una mínima prueba de capacidad para ejercer su cargo (y no digamos intelectual o cultural)”.

“GROSERÍA es el costo que representa para los ciudadanos, sus comidas, coches oficiales, choferes, viajes y tarjetas de crédito”.

“GROSERÍA es que sus señorías tengan casi cinco meses de vacaciones al año”.

“GROSERÍA es que sus señorías cuando cesan en el CARGO tengan un colchón del 80% del sueldo durante 18 meses”.

“GROSERÍA es que los ex ministros, ex secretarios de estado y altos cargos de la política cuando cesan son los únicos ciudadanos de este país que pueden legalmente percibir dos salarios del erario público”.

“GROSERÍA es que se utilice a los medios de comunicación para transmitir a la sociedad que los funcionarios sólo representan un costo para el bolsillo de los ciudadanos”

“GROSERÍA es que nos oculten sus privilegios mientras vuelven a la sociedad contra quienes de verdad les sirven. Mientras, ¿hablan de política y de derechos sociales? ¡QUÉ GROSERÍA!”

Y le agregaría que, grosería es que tengamos más de la mitad de los mexicanos viviendo en condiciones de pobreza. Siete millones de NINIS, jóvenes que ni estudian ni trabajan, no porque no quieran estudiar y trabajar, simplemente, porque no hay… Que tengamos a más de 2 y medio de mexicanos sin empleo. Que tengamos más de doce millones de mexicanos que “trabajan” pero en empleos informales y en el comercio informal…Que seis de cada diez mexicanos no creen en sus autoridades, desconfiamos del manejo de los recursos públicos y del desempeño de los funcionarios en los tres niveles de gobierno. Que siete de cada diez mexicanos consideremos “muy malo” el desempeño en los gobiernos estatal, federal o municipal, en temas prioritarios como pobreza, seguridad, educación y empleo… EN FIN ,Y ASÍ NOS DICEN GROSEROS, CUANDO LO MENOS QUE MERECEN ES, UNA GRAN MENTADA DE MADRE…Y ESO que no hablamos de sus robos y negocios, de sus ligas con banqueros, policías y entreguistas… en fin, esas no solamente son groserías, dicen en mi pueblo: son verdaderas chingaderas… y si son groserías, también, son verdades…