¿Estan muertos, o desahuciados los periodicos?





Por: Mario Enrique Carbonell Chàvez

Resulta de sumo interés para la prensa escrita, principalmente los periódicos, si en realidad están ya muertos, o desahuciados, o que peligra su continuismo, vigencia y sobrevivencia, toda vez que son muchos ya los que opinan de esa manera y que pronostican y condenan el fin de su continuismo, vigencia y permanencia.

Antes, baste recordar un poco de historia, para señalar que el primer y gran acontecimiento de la humanidad civilizada, fue precisamente el descubrimiento de la imprenta por Gutember, a mediados del siglo XV, precisamente en el año 1450. Y es al mismo tiempo, el primer gran paso para el nacimiento del periódico, acontecimiento del impresor Johan Gutemberg, quien con su invento de los tipos móviles, fue quien determinó la aparición de esa maravilla que fue la imprenta. Aunque fue dos siglos después cuando germinó realmente el periodismo como tal, ya que en un principio la imprenta se ocupaba básicamente de la edición de libros, siendo precisamente el primero de ellos, La Biblia.

Así pues, el periódico, con mayor o menor perfeccionamiento técnico, alcanza grandes tirajes con la aplicación de la máquina de vapor a la rotativa, trabajos que permanecieron a lo largo de tres siglos, del XVIII al XX, acompañando al final del siglo XX a la radio y posteriormente a la televisión. Alcanzando su máximo esplendor el periodismo desde mediados del veinte a nuestros días, incluso, a pesar de la enorme influencia del internet, y la tv y radio.

Sin embargo, el periódico sigue siendo un medio de comunicación básico, elemental e insustituible, no obstante todas las fallidas predicciones acerca de su pronta desaparición. Ya que solamente los medios escritos contienen el secreto formidablemente inteligente y sensato, el de formar opinión; ya que lo medular, desde mi muy particular punto de vista, es que en ellos se busca precisamente la opinión, el sentir y el acuerdo de los muy diversos y plurales análisis de opinión política, económica, social y cultural, que enriquecen y nutren la verdadera visión, posición y contenido de cada uno de los problemas y situaciones de muy diferente origen y desarrollo. Principalmente de las dificultades que enfrenta la sociedad, el país y el contexto internacional.

En ellos se encuentran también el momento el acontecer mundial, o local, como la noticia y el reportaje, el artículo, columna, crónica, o la elemental editorial –solo rebasado por la radio, y el internet, pero no con la seriedad y profesionalismo del periodismo a ultranza-. Y siguen siendo la fotografía, e instantánea grafica, de los sucesos y acontecimientos – noticia, de los eventos y hechos mundiales.
Y con respecto a esta rivalidad mezquina entre la realidad periodística y la virtual, baste señalar que esta amenaza –de la desaparición de los periódicos- de finales de siglo, presentada por el internet a los medios impresos,…ese últimatum, según los incansables agoreros de su desaparición, lo ha incitado –al periodismo-, a renovar esfuerzos, para precisamente, aprovechar las colosales posibilidades que ofrece la red. Lo cual debo interpretar, como el hecho de que, el internet y las páginas webs, son explotadas y son aprovechadas para su interés y conveniencia por los propios periódicos, en cuanto a que en ésos espacio cibernéticos se difunda, multiplique y conformen cada vez más un mayor y adicional número de lectores de medios impresos. Lo que implica, que a pesar de que la demanda de periódicos es cada vez menor, físicamente, la oferta crece por otro lado en los medios virtuales. Lo anterior, sin que afecte drásticamente la circulación de los diarios, ya que muchos periódicos y revistas surgen en el mercado cada día; y muy pocos, llegan a la quiebra por motivos de perdidas en la producción y distribución, a nivel mundial.
¿Estan muertos, o desahuciados los periodicos? ¿Estan muertos, o desahuciados los periodicos? Reviewed by .Radiar Noticias Mx on 1:57 p.m. Rating: 5

No hay comentarios.:

¿Que opinas de esta nota?

Con tecnología de Blogger.