En Cuba... Por Arturo Bravo





Por Arturo Bravo



Mientras volamos en la extraordinaria línea aérea de areomexico, rumbo a nuestra patria, se me vienen a la cabeza varias reflexiones de nuestro breve pero muy fructífero viaje al bello y polémico país de Cuba. Primeramente debo aclarar estimado lector, que muchos prejuicios fueron totalmente enterrados; pero también surgieron varias interrogantes que mediante varios testimonios quedaron de alguna manera resueltos o de plano dejaron para mas adelante una serie de confusiones e incluso molestias ante la pasividad, paciencia, fe, lealtad o como usted le quiera llamar estimado lector a esa conducta inexplicable ante los gobernantes y sus excesos de cualquier parte del mundo. Oiga, otra importantísima aclaración, nada de niños arremolinados y desesperados pidiendo dulces, ropa, zapatos, pantalones u otras cosas mas. Eso si, es una ciudad dinámica, con notables limitaciones materiales pero con una gran calidad humana que llena todo hueco. Eso si, su comida es buena pero sin picante lo cual deja mucho que desear, para quienes lo requieren; el uso de la papa, el frijol, arroz, pan, carne de puerco y frutas como la papaya, melón, guayaba y el mango, resultan parte esencial de su dieta. Las bebidas alcohólicas como la cerveza son altamente intoxicantes, al igual que su delicioso mojito y sus variadas combinaciones con ron-me platicaron que la "Bodeguita de enmedio" no tiene sucursales- El consumo de tabaco es notable, ya que estar en la Habana sin un delicioso puro, pues ya se han de imaginar. Sus edificios aun muestran los estragos de la falta de recursos, aunque ya empieza a trabajarse en ello en coordinación con la UNESCO, para darle color y vida a su bello patrimonio histórico. Claro esta que bajo el mandato de Raúl Castro, el pueblo de Cuba, empieza poco a ser respetado, de no hacerlo el sistema corre peligro de sucumbir, pues uno de los malestares es esa "asfixiante cerrazón al mundo externo y el trato de menores que se les da" Los cubanos ya quieren autodeterminarse, errar, sentir los tropiezos como suyos, hasta en la elección de sus gobernantes. Reconocen y defienden su revolución, enaltecen y respetan a quienes dieron su vida por ello. Pero sentí estimado lector, que los cubanos ya quieren escribir su propia historia, dejar de temerle al monstruo gringo, enfrentarlo y entenderlo, mas no adorarlo, pero ser ellos quienes lo decidan como adultos. Sino, entonces de que sirve tanto estudio de primer nivel, si solamente lo van a poder utilizar dentro de su patria; ya quieren demostrar sus capacidades y ponerse a prueba con el mundo, sabedores de que gozan de una excelente fama en la medicina, agronomía, mecánica y otras mas. Ratifico que su sistema escolar es magnifico, aunque ya empieza a mostrar naturales debilidades, tiene huecos que preocupan, pero se ocultan, como las tele secundarias que empiezan fracasar, por la ausencia de profesores y con ello el relajamiento de los pupilos; o el sistema de salud que actualmente carece de especialistas, "pues estos se encuentran fuera del país" en especial en Venezuela dando asistencia, capacitación y conferencias; dejando sin cobertura a su gente. Desde 1958 a la fecha se ha vivido con un sacrificio en aras de la revolución, el discurso ha sido exitoso en cuanto a convencer y controlar, eso se traduce en algo llamado miedo a lo desconocido. Cuando salíamos de Varadero hacia la Habana, me entere que los cubanos no pueden pescar ni camarón ni langosta, ya que ambos están protegidos por el estado y solamente pueden ser exportables. El consumo de la carne de cerdo, esta sometida por la voracidad de los productores particulares, ya que en ese rubro, el gobierno de Castro, no tiene la capacidad para enfrentar la demanda, ocasionando con ello que el precio se dispare. Un cubano-me platicaba una sonriente empleada- "gana al mes en promedio 300 pesos, de los cuales 200 se destinan a la fruta y la verdura" Por cierto, un sector ampliamente beneficiado por el sistema político, es el militar, no esperaba menos, pues de ellos depende que se mantenga el equilibrio y la paz en la región. Los militares y sus familias gozan de muy buenos privilegios, desde poder obtener casa y vehículo a precios muy bajos, hasta gozar de espléndidas vacaciones con todo pagado. Por cierto, muy mala la comida del hotel Neptuno, ni siquiera podíamos beber agua sin tener que pagar un alto precio. Hasta es eso nuestro moneda anda de la jodida, ya que un cuc o peso para los extranjeros cuesta 14. 25 pesos mexicanos. Y me pregunto estimado lector, hasta donde seria posible que en nuestro país, se empezara a pensar en la idea de tener una moneda con un costo para los extranjeros. Le recomiendo que lleve una dotación de chiles, chicles, bolsas de frituras. La papa es un alimento muy preciado en Cuba, dura muy pocos meses su producción y cuando escasea en verdad hay frustración. Hay muchas limitaciones innecesarias, las cuales creo se van acabar cuando muera Fidel Castro, ya que Raúl definitivamente no tendrá esa fortaleza ni creo que ya pretenda imponerse a que su pueblo siga siendo tratado como menor de edad. Se siente en el ambiente una calma chicha, hay una especie de tregua, la cual se dio por la entrada de la telefonía celular, la autorización de poder vender y comprar casas y terrenos y otros pocos beneficios mas. La corrupción a simple vista no parece existir, pero como podemos llamarle a esa actividad que desde siempre, han realizado muchas jovencitas con los extranjeros por unos pesos o el hecho de que las absurdas restricciones comerciales, solo provoquen que el ron y los habanos o lo que sea, se comercialicen a escondidas por todos lados. Y están las valiosas propinas que todo prestador de servicio busca afanosamente del turista, ya que lo raquítico de su moneda local, de muy poco les sirve para mayores necesidades. Algo que no quiero dejar de lado, el Estado le cobra todo a sus gobernados, las filas de cubanos para obtener algún producto de primera necesidad son enormes, todo cuesta. El yugo que impuso Fidel Castro, ha sido muy pesado y atroz para un pueblo que no lo merece, es mas, ningún pueblo debe pagar las paranoias de sus líderes, ni mucho menos heredar los miedos o prejuicios de sus padres o sus gobernantes. Agradezco de corazón a cada uno de esos maravillosos seres humanos, su confianza e información que me proporcionaron; los cubanos y su cálido trato a quien saben que es mexicano, dejaron una honda huella en mi persona. Mi arribo a México de inmediato me despertó a la violencia y frialdad de las grandes ciudades, en donde el trato es cada vez mas impersonal y rudo.
En Cuba... Por Arturo Bravo En Cuba... Por Arturo Bravo Reviewed by .Radiar Noticias Mx on 12:39 p.m. Rating: 5

No hay comentarios.:

¿Que opinas de esta nota?

Con tecnología de Blogger.