Menos maestros... Por Erik Aviles #Michoacan

Por Horacio Erik Avilés

En 2012 y por quinto año consecutivo, en el sector educativo michoacano se perdieron recursos federales y plazas docentes debido a los bloqueos de la CNTE. Con ello, habrá menos maestros frente a grupo de los que podrían estar atendiendo a nuestros niños y jóvenes. La razón es que otorgar plazas por concurso de oposición abierto no es coordenada para los vectores del poder y del control sindical estatal.

Nuestra entidad y Oaxaca fueron los grandes ausentes en el Examen Nacional de Conocimientos y Habilidades Docentes, realizado el 15 de julio del año en curso por la Secretaría de Educación Pública para otorgar plazas en los niveles educativos de prescolar, primaria y secundaria.

Es innegable que ello impactará negativamente las finanzas educativas de nuestra entidad, ya que se habrán de solventar las necesidades de contratación de personal con recursos estatales y bajo criterios acordes a los intereses de la CNTE, la cual por ejemplo pactó con el Gobierno del Estado, en la minuta 2011 que se otorgaran 200 plazas para personal administrativo y de apoyo a la educación (200 PAAE), mismas que hasta la fecha se desconoce el nombre de los beneficiarios y los criterios de asignación de tales recursos, a pesar de que ya se realizó un supuesto concurso.

En cambio, en esta edición del Examen Nacional de Conocimientos y Habilidades Docentes, se concursaron 21,431 plazas magisteriales en un proceso en que participaron 134 mil 745 sustentantes, 96.4% del total de los inscritos, estando distribuidos en 292 sedes, bajo la vigilancia de 973 observadores pertenecientes a organizaciones sociales, empresariales, de padres de familia y del SNTE. Este es el proceso más serio de contratación de maestros que se ha realizado en la historia de nuestra nación, del que Michoacán permanece autoexcluido por la negativa rotunda de la CNTE a participar en la Alianza por la Calidad de la Educación. La pérdida estatal originada por las presiones de esta fracción sindical hasta el momento es de más de tres mil plazas docentes en los niveles ya señalados y se seguirá incrementando si continúa la renuencia a la transparencia y rendición de cuentas, vista en forma de evaluación, mezclada por un enquistado celo hacia todo lo que implique otorgamiento de beneficios sin criterios sindicales de por medio.

Tal postura atenta directamente contra de la calidad educativa, del desarrollo integral del país y de nuestra entidad en particular, ya que al no haber suficiencia presupuestal para contratar másmaestros continuaremos pagando trabajadores de la educación con recursos estatales y en muchas ocasiones bajo contratos temporales, lo cual atenta contra la estabilidad laboral de los docentes y contra la salud de las finanzas públicas, que no pueden hacer frente de manera expedita a compromisos de tal magnitud.Es momento en el que debemos formar parte de la solución.

Por otra parte, al no poder los michoacanos participar en concursos de esta naturaleza como observadores ciudadanos, no podremos impedir mediante participación ciudadana que se continúe con prácticas irregulares en el manejo de las plazas docentes, tales como la herencia, intercambio o la venta de plazas, pues de esta manera afectamos la calidad educativa que deben recibir los niños y jóvenes michoacanos, ya que no tendremos la certidumbre cabal de que los actuales profesores frente a grupo sean los mejores calificados profesionalmente.

Es momento de que las autoridades correspondientes no se dejen coaccionar por intereses extraeducativos y logren obtener tales recursos federales, para que ya no se sigan desperdiciando plazas docentes por oposición. El próximo año Michoacán deberá de estar contando en el sector educativo con la mayor cantidad de recursos federales posibles, aprovechados con la máxima eficiencia para poder revertir una tendencia presente durante décadas, que ningún niño michoacano se merece y que empaña la imagen de muchos buenos trabajadores de la educación que forzosa e involuntariamente encubren a quienes medran con los recursos públicos.

Paralelamente, los ciudadanos debemos comprometernos para vigilar conjunta y estrechamente todos los procesos que se realizan para seleccionar a los profesores que estarán frente a un grupo de alumnos impartiendo clases durante al menos tres décadas.

No obstante su autonomía, es momento que los sindicatos asuman un exhorto social para que contribuyan en lo sucesivo a que tanto alumnos como maestros serán evaluados y así adquirir el compromiso para levantar a Michoacán de los últimos lugares en educación básica, atender integralmente a los más de 305 mil analfabetas y al millón y medio de michoacanos en situación de rezago educativo, quienes a través de la educación obtendrán la reivindicación más trascendente de su dignidad humana que un gobierno puede brindarles.

Comentarios: erik.aviles@gmail.com y Twitter: @erik_aviles