Peña Nieto apoyara con recursos adicionales a Michoacan

Por Lic. Enrique Crabonell Chávez

Terminó ya el periodo de campañas electorales, noventa días intensos, aciagos y llenos de controversias. Concluyó el cómputo de votos de la elección presidencial y los resultados coinciden con los ofrecidos por el IFE desde la noche misma de la jornada electoral; Enrique Peña Nieto obtuvo 38.21 por ciento de votos, mientras que Andrés Manuel López Obrador el 31.59.

Culminó legalmente entonces una primera etapa de cuestionamientos pos electorales de presunciones de fraude, ilícitos y demás delitos electorales, exigidos por los partidos perdedores, el PRD básicamente, que contendieron para la Presidencia de la República, el Congreso de la Unión, y seis estados de la República, junto con el gobierno de Distrito Federal. Los resultados, cifras y graficas estadísticas y las impugnaciones e inconformidades del caso al momento, ya todos las conocemos.

Ahora en nuestro terruño Purépecha, para no ir más lejos, es donde más nos conviene retomar el trabajo, el estudio -aunque ya salieron de vacaciones la mayoría de alumnos y maestros, con un gran número de horas clase y días perdidos por plantones, paros y marchas de los del CNTE-; y la inversión productiva por parte del empresariado, etc. Pero insisto, es aquí y ahora en donde más nos apremia volver a la normalidad cívica, ciudadana y productiva; como lo es el revertir el tiempo perdido y retomar nuestros trabajos, y por su parte el gobierno procurarnos los empleos, reactivar la economía en el campo, la ciudad y las fábricas; restablecer los servicios, y en general el bienestar y desarrollo de los michoacanos.

Y como primer paso, en mi particular punto de vista, es que para que haya un buen gobierno es necesario, urgente e indispensable, el contar con qué -el cómo es responsabilidad de funcionarios públicos y la burocracia en general-. Y él no contar, no tener con qué -recursos, apoyos, y transferencias de la federación, que es la que prácticamente nos sostiene-, va a ser aun todavía muy complicado y hasta imposible lograrlo. Ya que dichos recursos presupuestales, que nos vienen en su gran mayoría de la Federación, hasta ahora han sido escasos, insuficientes y tardíos. Apenas y para ir saliendo de deudas, pagos pendientes, cuentas por pagar a proveedores y hasta la nómina de los Municipios, ya no se diga no dejar inconclusas obras prioritarias, de zonas fundamentalmente de marginación y pobreza.

Y si a esa problemática le sumamos, que pesa sobre nuestros hombros la importunada carga de la deuda heredada por la administración perredista que concluyó hace unos meses, pues las dificultades, apremios y urgencias se complican más de la cuenta, y con riesgos y pesadumbres que pueden hacer fallar la fe, credibilidad y confianza de sus gobernados. Incluso y se ha dicho por ahí, que hasta un –indeseado y perjudicial-, estallido de inconformidad general de la población, como resultado de la falta de liquidez y sustento económico gubernamental que está, tal vez, siendo demasiado tolerante por falta de resultados en relación a dicha aclaración sobre la caótica y confusa situación que guardan las finanzas públicas estatales.

Así lo confirmaron las propias palabras de preocupación y sobresalto del mandatario michoacano, respecto a las primeras dificultades que enfrentó su gobierno, cuando afirmó que “Independientemente de los recortes federales, de las reducciones federales, de lo que sea, lo primero que debemos hacer de forma institucional es pagar lo que esté documentado y luego continuar con la obra inconclusa”.

En tal virtud, es hora y momento para que de forma inmediata, apenas inicie la semana venidera, se dé a conocer de una vez por todas, sin postergar más lapsos, la real situación que se guarda de la deuda pública, la que tanto nos agobia y desmoraliza a los michoacanos; sin que haya todavía hasta el momento, ningún resultado de las auditorias, e investigaciones anunciadas.

Es nuestro más ferviente deseo, que a partir de que conozcamos la exactitud acerca de la multicitada deuda pública, y sus graves montos que nos ponen a temblar, se acabe al mismo tiempo con tanta especulación, acusaciones y enconos político partidistas, y se hagan públicos ya los resultados iníciales, se conozcan las primeras conclusiones e indagaciones de las auditorías externas, tanto del Consejo Ciudadano conformado para el mismo fin, amén de las propias comisiones en la Cámara de Diputados que se abocan al análisis de la ignominiosa deuda pública; misma que todavía hace unos cuantos días, el propio mandatario michoacano Fausto Vallejo Figueroa informaba, que efectivamente asciende a casi los 40 mil millones de pesos.

Por lo pronto y para tranquilidad de los michoacanos, El gobernador del estado anunció que este mes se enviará al congreso del estado una solicitud para reestructurar la deuda pública del gobierno del estado, en tanto que Peña Nieto apoyará con recursos adicionales a Michoacán, aseguró.