Captura la Policía Federal en Tamaulipas a cuatro presuntos "Zetas", vinculados con el Cártel del Golfo

Resultado de las labores de inteligencia e investigaciones de campo que realizan elementos de la Policía Federal en Ciudad Madero, Tamaulipas, se logró el día de ayer la captura de cuatro presuntos "Zetas" dedicados al secuestro y que trabajaban para los principales líderes del Cártel del Golfo.

Con el apoyo de la Secretaría de Marina y la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada la Policía Federal ubicó la base de operación de esta banda en los municipios de Altamira, Ciudad Madero y Tampico. Cabe mencionar que se han detenido diez integrantes de esta organización criminal.

Los presuntos secuestradores mediante amenazas, extorsionaban a los empleados de notarías públicas para que legalizaran los inmuebles que les eran entregados como pago a cambio de la liberación de sus víctimas. Además, vendían las firmas y sellos de las notarías a los llamados "Coyotes" con los cuales trabajaban realizando fraudes y compras ilícitas.

A través de extorsiones y amenazas también formaron un grupo de taxistas a quienes obligaban a trabajar como informantes de las operaciones que realizaba la autoridad en Ciudad Madero, Tamaulipas.

Mediante acciones de inteligencia, coberturas, consultas a Plataforma México y declaraciones de las víctimas se logró ubicar a los presuntos responsables.

Durante los cateos realizados con base a la orden número 547/2009, librada por el juez tercero federal penal, especializado en cateos, arraigos e intervenciones telefónicas, se obtuvieron de dichas diligencias: documentación de escrituras de inmuebles, facturas de vehículos, pagares y diversos títulos de propiedad, hechos asentados en la acumulación de la averiguación previa número PGR/SIEDO/UEIS/096/2008.

En este sentido es importante mencionar que se logró obtener documentación de aproximadamente 70 inmuebles que fueron producto del pago de varios rescates.

Los detenidos fueron asegurados en las siguientes fechas:

• Manuel Ulises Llanas Silva, alias "Gerardo" detenido el 4 de noviembre de 2009, de 26 años de edad, con estudios de preparatoria, originario de Tampico, Tamaulipas, de ocupación mecánico y venta de autopartes. Su función dentro de la organización consistía presuntamente en levantar a las víctimas, negociar, y cobrar los rescates.
  
  
  
  
  
  
• Ángel Sierra Junco alias "El Negro", detenido el 4 de noviembre de 2009, de 36 años de edad, originario de Ciudad Madero, Tamaulipas, de ocupación Mecánico. Dentro de la organización, presuntamente brindaba protección y seguridad al momento secuestrar a las víctimas.
  
  
  
  
  
  
• Brendo Skylab Ruíz García alias "Brandon", detenido el 4 de noviembre de 2009, de 36 años de edad, originario de Ciudad Madero Tamaulipas, de ocupación empleado de Pemex. Su presunta función era la de brindar protección y seguridad al momento secuestrar a las víctimas.
  
  
  
  
  
  
• Juan Antonio Olvera Gutiérrez alias "El Raro", detenido el 4 de noviembre de 2009, de 28 años de edad, originario de Ciudad Madero Tamaulipas, con estudios de preparatoria, de ocupación empleado de Pemex. Presuntamente su función era la de brindar apoyo en la logística de los secuestros.
  
  
  
  
  
  
• Lino Romo Gómez detenido el 19 de octubre de 2009, de 35 años de edad, con estudios universitarios truncos, originario de Puebla, Puebla, de ocupación contratista y consultoría. Su función dentro de la organización criminal era la de presuntamente proporcionar información de las víctimas, debido a que éste les realizaba trabajos de construcción.
  
  
  
  
  
  
• Francisco Javier Morlet Pérez alias "Paco", detenido el 19 de octubre de 2009, de 40 años de edad, con licenciatura trunca, originario de Tampico, Tamaulipas. Mantenía un negocio de renta de maquinaria para la construcción. Su función dentro de la organización criminal, era la de presuntamente señalar a personas para que estas fueran secuestradas.
  
  
  
  
  
  
• icente Alberto Saldaña del Ángel, detenido el primero de octubre de 2009, de 35 años de edad, con licenciatura en ciencias de la comunicación, originario de Tampico, Tamaulipas; familiar y presunto colaborador de principales líderes del Cártel del Golfo. Encargado de la logística y operaciones, mediante secuestros y extorsiones, intimidación con uso de la violencia, realizadas a empresarios, obligándolos a comprar o tomar sus servicios, los cuales eran productos de las actividades ilícitas antes mencionadas.
  
  
  
  
  
  
• Manuel Casanova Gutiérrez, detenido el primero de octubre de 2009, de 52 años de edad, con licenciatura en derecho y contador público, propietario de taxis, originario de Tampico, Tamaulipas. Su función era la de presuntamente realizar gestiones, mediante la extorsión y amenaza en las notarias públicas, de los inmuebles entregados como pago de rescate. De igual forma vendía las firmas y sellos de las notarias, a los llamados "Coyotes", con los cuales trabajaba, para hacer fraudes y compras ilícitas además de manejar la contabilidad de giros negros propiedad de otros miembros del Cártel del Golfo.
  
  
  
  
  
  
• Sergio Antonio Maldonado Salinas, detenido el 21 de septiembre de 2009, de 25 años de edad, originario de México, Distrito Federal, empleado de gobierno por "La Comapa", con grado de estudios de licenciatura en arquitectura. Dentro de la organización, presuntamente proporcionaba información de posibles víctimas, valiéndose del cargo que tenía como servidor público dentro de "La Comapa".
  
  
  
  
  
  
  
• Jesús Manuel Meraz Arellano, detenido el 21 de septiembre de 2009, de 57 años de edad, originario de Cuauhtémoc, Chihuahua, de ocupación fotógrafo. Su función era la de cuidar las propiedades, producto del pago de los rescates.

El modo de operar de esta organización criminal consistía en que, encapuchados y con lujo de violencia, interceptaban a sus víctimas, cuando estas se dirigían a lugares que visitaban frecuentemente, siendo llevados en sus propios vehículos, para posteriormente cambiarlos a otro.

Esta organización criminal utilizaba como medida de presión amenazar a los familiares de las víctimas con dañarlos o privarlos de la vida en caso de no ser cumplidas sus exigencias económicas.

Una de las características de este grupo, era que durante su cautiverio las víctimas eran amarradas y encadenadas; además de que exigían grandes cantidades de dinero, propiedades y vehículos.

Derivado de la investigación de gabinete y los resultados obtenidos de dichos aseguramientos, se tiene conocimiento que esta organización criminal es responsable de siete secuestros denunciados y se tiene conocimiento de 37 víctimas más.