Antoni Tapies I Puig... Por Teresa Da Cunha

Por: Teresa M.G. Da Cunha Lopes

Hoy murió con 88 años de edad, en Barcelona, Antoni Tapiès I Puig .

Antoni Tapiès I Puig, barcelonés, pintor, escultor, desde el 1948 (momento en que aparece ligado al grupo de la revista de vanguardia "Dau el set",con Joan Brossa, Joan Ponç, Modest Cuixart, Joan Josep Tharrats, Arnau Puig y Juan Eduardo Cirlot) hasta su muerte nunca dejó de estar entre los primeros, entre los grandes, integrante de ese pequeño grupo de seres que nos emocionan hasta el alma y que nos hacen re-descubrir lo que significa esa llama humana, la existencia del genio de la Humanidad.

Seres de luz y de excepción que nos llevan a murmurar (como una oración) el poema que Baudelaire escribió sobre el cuadro de Delacroix , “Scène des massacres de Scio, familles grecques attendant la mort ou l’esclavage : (.....) .Car c’est vraiment, Seigneur, le meilleur témoignage/Que nous puissions donner de notre dignité/Que cet ardent sanglot qui roule d’âge en âge/Et vient mourir au bord de votre éternité !

Por estos acasos de los destinos que se entrecruzan, Antoni Tapiès I Puig marcó mi vida de una manera singular.

En 1990, trabajé, brevemente, para la Tokyo Art. Expo y una de mis funciones fue la de viajar a Barcelona para preparar la logística del viaje a Tokyo de Antoni Tapiès para la ceremonia de entrega del Premio del Emperador y preparar, como curadora responsable de la presencia de las galerías europeas en la Tokyo Art Expo la participación de las Ediciones T, dirigida por su hijo Miquell Tapiès, en una grande retrospectiva de los grabados de Antoni Tapiès I Puig.

Pero, la emoción pura que puede provocar la obra de Antoni Tapiès la descubrí, más tarde , en un domingo del 1991, en Serralves, frente a frente de una de esas inmensas telas de Tapiès en que los cafés, los amarillos, los negros, las texturas, los materiales nos transportan a otra dimensión. La Fundación Serralves, en Oporto, presentaba entonces la exposición itinerante del mismo nombre, cuyo catalogo, con magníficos textos de Manuel J. Borja-Villel, Rudi Fuchs, Donald Kuspit y Georges Raillard, conservo como un tesoro.

Pero al lector poco le importará mis recuerdos y emociones, o esta búsqueda del “tiempo perdido” desencadenada por la lectura de un titular en los periódicos de hoy.

Regresemos, por lo tanto a la crónica dura y pura y a los elementos principales de una biografía del genio barcelonés.

Antoni Tapiès I Puig expresó en su Arte el paradigma de la discontinuidad de la materia, de la tierra, de los átomos y de las partículas, que plasmó formalmente en el uso de materiales ajenos a la expresión plástica academicista y en la experimentación de nuevas técnicas.

Las pinturas matéricas son una parte sustancial de la obra de Tàpies y han constituido un proyecto en evolución hasta su muerte.

Desde 1952, se alejó del surrealismo e inició un período de integración en su obra de objetos cotidianos ("Montón de platos", 1970) junto con referencias y signos antropomórficos, a la vez que su cromatismo pasaba del monocromatismo o colores neutros a otros de mayor viveza.

Su obra posterior, correspondiente a los años 80 y 90's, incluye pinturas de gran formato y revela cierta vuelta al figurativismo, como en la obra "Fertilidad", donde remite a las simbologías prehistóricas de las cuevas pirenaicas; "Paisaje y taza", obra de tres metros de altura que contiene un gran cráneo humano; o "Figura sobre morado", con una desgarbada silueta humana sentada con una equis y sobreimpresa en una gran cruz blanca borrada.

De su obra principal destaco"Gran pintura gris" (1955), "Ovalo blanco" (1957), "Puerta gris" (1958), "Cuadros grises sobre marrón" (1959), "Forma triangular sobre gris" (1961), "Gran equis" (1962), "Relieve ocre y rosa" (1965), "Incrustación y cifras" (1974), "Huella de silla" (1980), "Díptico de campaña" (1991), "Inspiración" (1991), las xilografías "Nocturn" y "Gest" (1995), "Rinzen" (1998) y el cartel del centenario del Fútbol Club Barcelona (1999).

Académico de Bellas Artes de Berlín (1982) y Honorífico de la Kunstlerhans de Viena (1989), Honorario de Bellas Artes de San Fernando (México,1989) y de Bellas Artes de Francia (1994), es Gran Oficial de la Orden de Santiago (Portugal,1996) y tiene varios doctorados "honoris causa", como los del Royal College of Arts de Londres (1982) y las Universidades de Barcelona (1988), Tarragona (1994) y Complutense (2003).

Ha recibido los premios UNESCO y Príncipe de Asturias de las Artes (1990), Medalla Oro de Bellas Artes (1981), Premium Imperiale de Pintura de la Asociación Japonesa de Arte (1990) y los premios Tomás Francisco Prieto (1991), Wolf de Israel (1982, y compartido con Marc Chagall, el Rembrandt de la Fundación Goethe de Basilea (1984), Premio Nacional de Pintura de Francia (1985), Premio Herbert Boeckl de Austria (1994), Premio Nacional de Cultura de la Generalitat (1995), Nacional de Grabado y Arte Gráfico (2002) y Velázquez de Artes Plásticas (2003).


Casado con Teresa Barba Fábregas, es padre de tres hijos ,Antoni, Clara y Miquel.

Pero para mí, estará siempre presente en la emoción de una tarde de Domingo en Serralves , en que los trazos mágicos de Antoní Tapiès se unían a las trayectorias lentas de los átomos del Duero.